Barcelona ya tiene su tres estrellas

El restaurante Lasarte de Barcelona, del cocinero vasco Martín Berasategui (56 años), ganó ayer la tercera estrella de la guía Michelin 2017 para España y Portugal. Lasarte se convierte así en el único tres estrellas nuevo de la guía. Y aún más: en el primero de la ciudad de Barcelona.

Berasategui confesaba anoche, justo después de conocer la noticia, que se considera "el hermano mayor de un equipo humano que es inconformista por definición". El Lasarte abrió hace 10 años en Barcelona, ciudad en la que el chef vasco agradece emocionado "la buena acogida". Mientras tanto, el jefe de cocina del Lasarte, Paolo Casagrande (36), explicaba que en el restaurante sienten auténtica pasión por el producto de proximidad: "No en vano las gambas de Palamós son uno de nuestros productos estrella!"

Si Berasategui consiguió revalidar ayer su condición de chef más estrellado del Estado -ha pasado de tener siete estrellas a poder presumir de tener ocho-, la sorpresa más destacada de la noche fue quizás la del restaurante Ca l'Arpa, de Banyoles, que consiguió una estrella.

Estrella reencontrada

Se da la circunstancia de que el año pasado la guía roja quitó al restaurante bañolense la única estrella Michelin que ostentaba desde 2007. Un año después, se la vuelve a otorgar. Cuando se anunció la noticia, el chef Pedro Garra recibió una de las ovaciones más fuertes de la noche a cargo del resto de cocineros asistentes al acto, que se celebraba en el Mas Marroch, en Vilablareix (Girona).

Con este retorno de la estrella pródiga en la capital de Pla de l'Estany, la guía Michelin toma una decisión que los chefs ayer no recordaban que hubiera tomado, al menos, en los últimos 10 años. "Para nosotros es importante estar en la guía Michelin, porque estamos en Banyoles, lejos de las rutas turísticas habituales, y este año, sin la estrella, hemos notado que no venían clientes de fuera". En cambio, los comensales catalanes, los de casa, no han dejado de ir nunca ni de darle ánimos.

Junto con Pere Arpa, otros cuatro cocineros catalanes recibieron ayer su primera (y codiciada) estrella Michelin. Son Xavier Pellicer, del Céleri, en Barcelona; Fran López, del Xerta, también en Barcelona; Joel Castanyé, del La Boscana, en Bellvís; y Vicent Guimerà, de l'Antic Molí, en Ulldecona.

Felicidad quintuplicada

Nada más conocer la noticia, los cinco cocineros declaraban sentirse felices por el reconocimiento. "Premiar el Céleri es galardonar una cocina en la que los vegetales son los protagonistas de los platos", aseguraba satisfecho Xavier Pellicer, que ha recibido la estrella cuando apenas el restaurante acaba de cumplir sus primeros 18 meses.

Mientras tanto, los cocineros de Ulldecona y de Bellvís declaraban que se sentían contentos porque Michelin reconoce la cocina de territorio. Curiosamente, en Ulldecona, de 5.000 habitantes, hay otro restaurante con una estrella Michelin, del cocinero Jeroni Castell. "En l'Antic Molí trabajo la galera, tengo un menú de 16 platos sólo elaborados con estos crustáceos", señalaba eufórico Guimerà.

Por su parte, el chef Fran López fue galardonado con su segunda estrella Michelin. La primera la había recibido con sólo 25 años por Villa Retiro, situado en Xerta. Ahora, con 32 años, obtiene otra primera estrella por el restaurante Xerta, situado en Barcelona. "Estoy muy ilusionado, porque es un reconocimiento para la cocina del Ebro, y también por las muchas horas que dedicamos", comentaba entre felicitaciones.

Joel Castanyé, del restaurante La Boscana (Bellvís), también distinguido con una primera estrella, declaraba que su cocina es tradicional, actualizada, pero basada en el recetario catalán. "Ahora mismo, en el restaurante ofrezco espalda de cabrito elaborada a baja temperatura con puré de patata". O también un postre que es su versión de la crema de chocolate Nocilla. "Hago un cremoso de chocolate con un bizcocho de avellanas, un polvorón de avellanas y un helado de leche", detallaba Castanyé. Preguntado sobre qué cambiaba el hecho de haber obtenido una estrella, el cocinero de Bellvís replicó que "nada", en el sentido de que no pensaba modificar su cocina.

Eternos aspirantes

La nueva edición de la guía Michelin 2017 para España y Portugal no ha dado ninguna segunda estrella a ningún restaurante de Cataluña. Sí a la Escaleta, en Cocentaina (Comtat), y el Bon-Amb, en Jávea (Marina Alta).

Asimismo, los restaurantes Les Cols, de la chef Fina Puigdevall, y el Miramar, del cocinero Paco Pérez, se han quedado un año más a las puertas de conseguir la tercera estrella Michelin. Al igual que el Àbac de Jordi Cruz, que declaraba: "Este año decidí disfrutar de mi trabajo sin pensar en ellos pese a las siete inspecciones que he tenido en el restaurante en un año".

Por último, Xavier Pellicer reflexionó sobre cómo la Michelin ha cambiado su mentalidad a la hora de otorgar estrellas. "Ha abierto los parámetros, porque hasta ahora premiaba una cocina con unos preceptos en que la verdura no tenía tanto peso".