Rajoy no logra con la represión evitar la reedición de un 9-N de escala muy superior

En la gestión relativa al 1-0, mientras el TC ha cumplido con su objetivo Rajoy ha fracasado

Ernesto Ekaizer
2 min
Rajoy, després de l'1-O

El Gobierno de Mariano Rajoy no ha conseguido con las porras y la balas de goma de la Guardia Civil y la Policía Nacional llegar a su objetivo de evitar una reedición de la consulta del 9 de noviembre de 2014, que en el caso del 1-O ha sido a mayor escala.

Durante los últimos meses, el Tribunal Constitucional suspendió las leyes del Parlament, el decreto del Govern de la Generalitat y las normas o arquitectura legal del referéndum, pero no se esperaba, según fuentes judiciales, que Rajoy utilizara el mismo día del referéndum a las Fuerzas de Seguridad para entrar en los colegios electorales.

"Hemos colaborado durante meses para desactivar pieza a pieza la estructura jurídico-constitucional del referéndum elaborado por el Govern de la Generalitat, asistido a su vez por juristas. Lo que quedaba por hacer era simple: si no se podía impedir la votación en una consulta invalidada con anterioridad al 1-O, no tenía sentido hacerlo con la Policía Nacional y la Guardia Civil el mismo día", señaló una fuente que ha tenido una participación activa en las resoluciones de desarticulación de la estructura del referéndum.

Problema: Rajoy necesitaba por razones políticas evitar la reedición del 9-N, o la sombra del 9-N. En 2014, el entonces presidente, Artur Mas, decidió acatar la suspensión del referéndum, y convocó un “acto de participación ciudadana”.

Rajoy miró hacia otro lado y no envió efectivos de la Policía Nacional y Guardia Civil a Cataluña. Y en esa jornada votaron 2,3 millones de ciudadanos.

Pero en la división de facto del trabajo para el 1-O, entre el TC y Rajoy, el primero cumplió, por así decir, al desmontar la estructura del referéndum, mientras que Rajoy, al intentar evitar la reedición del 9-N , ha fracasado. El 1-O ha sido un 9-N a escala muy superior.

La represión ha sido un recurso inútil para conseguir el objetivo de Rajoy, y en cambio ha aportado al Govern una carta de triunfo indudable.

¿Cómo gestionarán Puigdemont, Junts pel Sí, la CU, y los motores de la movilización, la ANC y Òmnium, la jornada del 1-O?

Jordi Sànchez planteó anoche que se debe aplicar la ley de referéndum, esto es, aplicar el punto 4 según el cual en base a un triunfo del sí sobre el no el Parlament debería declarar la independencia. Puigdemont, después de Sánchez, indicó justamente que el camino es el que marca la ley de referéndum.

Si este es el camino, el Gobierno de Rajoy ya tiene su respuesta: la aplicación del artículo 155 de la Constitución. Y después de las medidas ya adoptadas hasta ahora -el 155 virtual por parte del TC- lo que quedaría se mueve en el contexto de la suspensión temporal de la autonomía y la convocatoria de elecciones autonómicas en Cataluña.

stats