Andreu Avel·lí Artís ‘sempronio’ 1957
27/03/2017

Viendo morir la zanja

2 min
Viendo morir la zanja

Peces Històriques Triades Per Josep Maria Casasús¡Ninot, quién te ha visto y quién te ve! A los más viejos de la localidad ayer me empeñé en hablarles del Pont del Mico, que antaño, de una zancada, salvaba la vía del ferrocarril en la calle de Casanova. Hoy, el paisaje urbano no recuerda ya el celebérrimo puente, que permanece no obstante cimentado en el corazón de los barceloneses antiguos. -¡El trabajo que nos dio construir esta zanja! -recuerda el señor Puig Batet, jefe ahora de la Zona ferroviaria-. No podíamos, naturalmente, interrumpir el servicio, y hubo un tiempo en que una vía pasaba ya por abajo, mientras la otra estaba aún al nivel de calle. […] Con rebajar el paso del tren, ni que fuese dejando la vía al descubierto, el barrio, el Ninot, dio ya un paso gigantesco. […] El Ninot ha sido el postrer baluarte de los tratantes de caballos, antes de agruparse todos en Hostafrancs, alrededor del Matadero. De los días aquellos, de cuando la calle de Valencia formaba un “impasse” en Casanova, detenida por campos de labor, queda aún, algún abrevadero frente a típicas tabernas. […] En todo esto pensaba yo ayer, por la tarde, aguardando con un grupo de técnicos la llegada del flamante alcalde, que tenía anunciada su visita a las obras de la cobertura de la zanja de la calle de Aragón. Llegó el señor de Porcioles y todo fue como una seda. […] A la vista de los veinte o treinta metros que se llevan ya cubiertos a partir de la calle de Urgel en dirección al centro, nuestro alcalde dio orden de que empezaran inmediatamente las obras de los otros tres tramos en que a efectos de su cobertura ha sido dividida la zanja de la calle de Aragón. […] ¿Cómo quedará la calle de Aragón una vez cubierta? Se lo pregunto al señor Segón, teniente de alcalde de Obras Públicas. -Existen tres proyectos en estudio -me informa-. Probablemente los encargados de decidir se inclinen por ensanchar algo las aceras y dejar la calzada central libre y despejada, teniendo en cuenta la intensa circulación prevista en esta calle… Antes ello no ocurra, ayer, siguiendo al alcalde y bordeando la zanja, recorrimos tranquilamente y a pie el Ninot. Quedan todavía muchas casitas trasnochadas y modestas, a cuyos balcones, llamado por el acontecimiento, asomábase el vecindario. […] Quien tuvo, retuvo, asegura el dicho. Al Ninot, pese a la zanja, no se le ha evaporado del todo su casticismo.

stats