El Supremo denegará la libertad de los presos

MadridEl tribunal del procés denegará en las próximas horas la solicitud de las defensas de los presos independentistas, planteada al término del juicio oral, de que se deje en libertad a sus acusados precisamente con la alegación de que ha concluido la vista. Las defensas habían invocado el argumento del Tribunal Supremo, que, en su auto del pasado 14 de mayo, rechazaba dejarles en libertad en ese momento en libertad porque se trataba de garantizar la terminación del juicio oral.

El tribunal, según fuentes jurídicas consultadas por ARA, considera ahora que, precisamente, la finalización del juicio oral, la confirmación de las elevadas penas solicitadas por la Fiscalía, la Abogacía del Estado y la acusación popular de Vox, y la proximidad de la sentencia incrementan el riesgo de fuga de los acusados. El tribunal ya dio una indiciosobre su orientación hacia la denegación de la libertad de los presos la semana pasada.

En el auto del 14 de junio pasado que prohibió a Oriol Junqueras jurar o prometer el acta de eurodiputado se señalaba que “el plenario ha concluido después de cuatro meses de intensa práctica de la prueba. Se han desarrollado los alegatos de las acusaciones y las defensas en apoyo de sus respectivas tesis. El juicio ha quedado ya “visto para sentencia”. De hecho, la deliberación se encuentra en su fase inicial”

Y la pista estaba aquí: "Este momento del proceso sitúa a la Sala en una posición privilegiada, hasta ahora inédita, para valorar la intensificación del fumus boni iuris [apariencia de buen derecho] que ha venido sosteniendo las medidas cautelares acordadas por el magistrado instructor y ratificadasd por la Sala de Recursos. El proceso penal, por tanto, está ya en el último tramo, en el momento de la deliberación acerca de los elementos fácticos y jurídicos que van a definir su desenlace. Precisamente por ello, el deber de esta Sala de asegurar los fines del proceso adquiere un significado especial, que condiciona la respuesta a cualquier solicitud que pueda deducirse".

El tribunal salvaba, por así decir, al soldado Llarena al estimar que las medidas cautelares de prisión preventiva -medidas con apariencia de buen derecho dictadas por Llarena- eran adecuadas entonces y se revelan todavía más correctas, con las pruebas del juicio oral, ahora.