El Supremo mantendrá la prisión de Junqueras por su falta de compromiso con la legalidad constitucional

MadridLa Sala de Recursos del Tribunal Supremo mantendrá en prisión incondicional al vicepresidente y primer diputado electo el 21-D por la lista de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Oriol Junqueras, en un auto que se hará público este viernes, día 5 de octubre, según han asegurado fuentes judiciales a ARA. Uno de los argumentos centrales del auto que elaboraba el tribunal presidido por Miguel Colmenero, también ponente en la petición de libertad de Junqueras, ha sido la ausencia de toda expresión de respeto o compromiso con el marco de la legalidad constitucional por parte de la defensa y del propio Junqueras.

El vicepresidente llegó en un furgón policial procedente de la cárcel de Estremera sobre las nueve y media de la mañana para hacer una parada intermedia en los calabozos de la Audiencia Nacional –el Tribunal Supremo carece de celdas para detenidos- y ser trasladado pasadas las diez al Supremo. Desde la planta baja fue conducido a la primera planta, a la Sala Segunda, a cuya amplia puerta se llega después de atravesar la célebre galería del Salón de Pasos Perdidos, donde esperaba el tribunal, integrado por Colmenero, como presidente y ponente y los magistrados Francisco Monterde y Alberto Jorge Barreiro; los fiscales Javier Zaragoza y Consuelo Madrigal; el abogado Andreu Van den Eynde, defensor del exvicepresidente; los letrados de la acusación popular Vox y letrados de otros imputados.

A debate: el recurso de apelación de la defensa de Junqueras contra el auto de prisión del pasado 4 de diciembre del magistrado instructor de la causa por rebelión, Pablo Llarena, quien a su vez confirmó en la citada fecha la resolución de la magistrada de la Audiencia Nacional, Carmen Lamela, de 2 de noviembre de 2017, enviar a prisión incondicional a Junqueras y otros consellers.

Esta vista suele ser una ceremonia procesal en la cual los imputados o recurrentes están representados por sus abogados. Sin embargo, en esta ocasión Junqueras solicitó estar presente. El tribunal aceptó la petición. Y aunque no está previsto dar la palabra al imputado, era un secreto a voces en los días previos a la vista de ayer: el presidente del tribunal ofrecería, al finalizar el debate, la palabra al vicepresident. Junqueras, dirigiéndose a Zaragoza, le replicó que él es creyente y un hombre de paz y de diálogo. En cambio, no hizo referencia alguna al respeto al marco constitucional a diferencia, por ejemplo, de la declaración de la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, cuando declaró ante el Supremo.

Un ensayo del juicio del 1-O

En cierto modo, la vista del recurso de apelación se convirtió en un ensayo de casi dos horas y media de lo que será el juicio del referéndum del 1-O, que, si no media modificación de criterio, se celebrará en el Salón de Plenos del Supremo, allí donde se inaugura el año judicial cada mes de septiembre. El abogado del vicepresidente, Van den Eynde, centró su exposición de 35 minutos en el derecho de participación y representación política de Junqueras, primer diputado electo por la lista de ERC el 21 de diciembre. Explicó que Junqueras tenía limitado el derecho de representar a la gente que le había dado su voto y que se daba el caso, además, de que podía ser candidato a presidente del Govern de la Generalitat. Insistió en que su cliente quería fomentar la concordia, el diálogo y la negociación.

El letrado desechó la existencia del delito de rebelión y la existencia de riesgo de reiteración delictiva, la principal razón que ha invocado el magistrado Llarena para mantenerle en prisión el 4 de diciembre. Van den Eynde quitó toda relevancia al documento llamado 'Enfocats' como presunta hoja de ruta de la conspiración soberanista, prueba en la que se apoyan la Guardia Civil y el magistrado Llarena.

"Esta vista no era una sesión del juicio oral que se celebrará en su día. Nosotros teníamos un tema urgente: la participación de Junqueras en el Parlamento y en las negociaciones para formar Govern, teniendo en cuenta de que como número uno de la lista de ERC puede ser candidato a presidente. Su situación en prisión limita claramente sus derechos", explicó tras la audiencia Van den Eynde a ARA.

El fiscal Javier Zaragoza, apoyado por la ex fiscal general del Estado, Consuelo Madrigal, fue el encargado de exponer las razones por las cuales la Fiscalía del Supremo pedía el mantenimiento de prisión. Zaragoza, autor intelectual de la competencia de la Audiencia Nacional para los delitos de rebelión y sedición, a través de los lineamientos que escribió el 5 de noviembre de 2015 – era entonces fiscal jefe de dicho tribunal- expuso durante una hora.

La línea argumental del fiscal: ilustrar al tribunal sobre el hecho de que detrás de lo que llamó las "buenas palabras de pacifismo y civismo" de Junqueras había una larga ristra de declaraciones, desde junio de 2017, en las cuales nunca se comprometía con el "respeto al marco constitucional y la legalidad". Zaragoza citó una a una esas declaraciones a los medios de comunicación y comparecencias.

Riesgo de reiteración delictiva

Mientras hablaba, el fiscal miraba a Junqueras y al tribunal. Zaragoza explicó que el magistrado Llarena había asociado el riesgo de reiteración del delito con la posibilidad de una victoria soberanista en las elecciones. "El 21-D dibuja un panorama poco alentador. Porque los partidos soberanistas hablan de restitución y de reposición", señaló, haciendo referencia al programa de ERC y algunos de sus actos electorales. "Se pueden defender las ideas independentistas, siempre que sea dentro del marco constitucional", añadió.

"La reiteración delictiva no solo quiere decir violencia", precisó. Según explicó, el derecho de participación política de Junqueras se había respetado. "Pero la prisión preventiva no permite una participación diaria en la vida parlamentaria", añadió. La Fiscalía del Supremo, tras la vista, difundió un comunicado con la idea central: ausencia en las declaraciones de Junqueras del respeto a la legalidad constitucional.

La defensa de Junqueras ha arriesgado con su recurso de apelación un primer pronunciamiento de la Sala de Recursos del Supremo. Ello tendrá influencia – dará también una pista a sus defensas- en la gestión que hará el magistrado Llarena el 11 de enero próximo, cuando presten declaración, a petición propia, en el Supremo el ex consejero Joaquín Forn, el diputado electo y presidente de la ANC Jordi Sánchez y el presidente de Omnium Cultural, Jordi Cuixart.