"Aprende a espiar el WhatsApp de tu novia": la violencia machista pierde la vergüenza online
El CAC exige a YouTube la retirada de 12 vídeos por difundir maneras de cibercontrolar a las mujeres
BarcelonaUna búsqueda rápida en YouTube con las palabras “espiar” y “móvil” ofrece una larga lista de videotutoriales que enseñan a los usuarios a “hackear” los móviles ajenos de forma gratuita y en pocos pasos. Solo en los primeros 100 resultados, la mitad de estos contenidos proporcionan herramientas para cibercontrolar a la mujer en el ámbito de la pareja. Algunos, de forma explícita, con títulos como “Aprende a espiar el WhatsApp de tu novia”; otros, utilizando descripciones que prometen que, si se siguen las instrucciones a rajatabla, “podrás saber si tu novia te es infiel y poner fin a una relación infructuosa”.
Esta tendencia evidencia cómo la violencia machista utiliza las nuevas vías de comunicación para reproducir los patrones de control y violencia hacia las mujeres, también en el mundo virtual, y así lo ha denunciado este martes el Consejo del Audiovisual de Cataluña (CAC) en un informe al que ha tenido acceso el ARA. El organismo público advierte que este tipo de vídeos, que cuentan con millones de visualizaciones, son especialmente perjudiciales para los más jóvenes y, por eso, ha adelantado que pedirá la retirada de hasta 12 vídeos actualmente disponibles en la plataforma audiovisual para “justificar el cibercontrol de las mujeres en el ámbito de la pareja”.
“Estos vídeos son especialmente graves porque presentan un sesgo de género y edad muy claro: las mujeres adolescentes son las principales víctimas de este espionaje digital que normaliza la violencia machista”, ha explicado al ARA el presidente del CAC, Roger Loppacher. Según la 'Encuesta de violencia machista en Cataluña de 2016', el 22% de las violencias machistas sufridas por las mujeres hasta los 15 años corresponden a hechos vinculados al ciberacoso y a comentarios o gestos sexuales. Además, una de cada cuatro chicas reconocen que hombres de su entorno las han controlado, al menos una vez en la vida, mediante el móvil.
Los resultados de la encuesta sobre violencia machista cuadran con la fotografía que se extrae del informe. El 90% de los usuarios que suben este tipo de material audiovisual a la red son hombres y, en uno de cada cinco vídeos, el título hace una referencia explícita a controlar la vida de la pareja mujer. Ninguno de ellos señala, sin embargo, al hombre como blanco de este espionaje digital. Si se atiende al contenido completo —la descripción, el audio y las imágenes que se utilizan en el vídeo—, un 45% de los casos analizados por el CAC justifican el control del teléfono de la mujer para comprobar su fidelidad en el ámbito de la pareja.
“La esencia del machismo, que ha traspasado las barreras del tiempo y que ha sabido adaptarse a lo largo del tiempo para seguir ejerciendo el control sobre las mujeres con un abanico de nuevos instrumentos, consigue que el mundo virtual y las aplicaciones informáticas también sean un espacio de inseguridad para las mujeres”, valora Alba Alfageme, psicóloga especializada en violencia machista.
La mayoría de los vídeos seleccionados por el informe del CAC, que suman un total de 22,9 millones de visualizaciones entre todos, tienen una estética similar. A través de diferentes capturas de pantalla, unas voces en off masculinas aseguran que cualquiera que ponga en práctica sus indicaciones puede “hackear” el teléfono de su pareja y ver “con sus propios ojos” con quién chatea, con quién se envía “selfies” o, incluso, cuál es su ubicación a tiempo real. “La red ofrece cierta impunidad a aquellos que tienen actitudes machistas: cuanta más agresividad contra la mujer, más éxito tienen aquellos comportamientos que, en la vida real, ya no se toleran o reciben rechazo social”, precisa Alfageme.
Si bien el acceso a los dispositivos de otra persona sin consentimiento supone una vulneración de su derecho a la privacidad, solo en uno de los 12 materiales denunciados se reconoce la naturaleza ilícita de esta ciberinvasión. El resto de vídeos proporcionan “las claves” para duplicar la cuenta de WhatsApp de la mujer, controlar y espiar el móvil del otro mediante una apli parecida a las herramientas de control parental o “hackear” las contraseñas de las redes sociales ajenas, por mencionar algunos ejemplos. De hecho, algunos usuarios no se privan de indicar qué aplis comerciales sirven supuestamente para ejercer este cibercontrol.
El presidente del CAC, sin embargo, asegura al ARA que son “optimistas” con la posible respuesta de YouTube, que deberá decidir si acepta la petición de retirada de estos 12 vídeos. “Creemos que serán sensibles, porque en otras ocasiones han actuado con sensibilidad y han retirado un centenar de vídeos”, apunta Loppacher.
