Del Arco 1959
24/01/2020

‘Mano a mano’: Elsa Maxwell (1959)

2 min
Caricatura de Manuel del Arco a La Vanguardia (6-V-1959)

Peces històriques triades per Josep Maria CasasúsElsa Maxwell es un producto del periodismo americano, conocida por la chafardera más grande del mundo. Habla por los codos. Presume de tener amigos en todas partes y se codea con las personalidades más destacadas del globo. Sin dinero, vive como los millonarios. Es columnista. -¿Se cree un ser necesario? -Sí. ¿Quiere saber por qué? Porque tengo dinamismo y pongo a la gente en disposición de que puedan pensar y les hago reír, para que sean felices. -Yo quiero hacerle discurrir a usted. -Lo estoy haciendo. -¿Confiesa que en el fondo de usted hay mucha vanidad? -No; míreme un momento: creo que soy la mujer más fea del mundo; es inútil tratar de embellecerme, y amo la belleza sobre todas las cosas. Soy un caso sin esperanza. -¿Siempre fue así? -Yo era hija única; perdí a mi padre cuando tenía quince años. Mi padre me adoraba. Antes de morir, me dijo que yo sola tendría que salir adelante, y no me dejaba nada, ni dinero ni nombre. Pero me dio cuatro reglas de conducta para defenderme. Quiere conocerlas? -Adelante. -Primera: Nunca tengas miedo de los otros, ni de la opinión de los demás. Segunda: Nunca colecciones objetos inanimados; reúne solo lo que necesites para vivir. En toda mi vida no he poseído nada, ni casa, ni tierras, ni cuadros de pintores famosos ni acciones, ni joyas. Tercera: Todos los seres humanos tienen algo ridículo; así, ríete de ti misma, antes que lo haga el prójimo. De esta manera nadie podrá mortificarte. Y cuarta: Toma las cosas ligeras seriamente y toma las cosas serias con menos seriedad de lo que son. -Cuatro reglas inteligentes. -No son mías, sino de mi padre. Yo he tenido el valor de observarlas. -¿No teme que a usted la acepten como un personaje pintoresco? -Me lo han dicho de muchas maneras; pero yo no hago nada para que me llamen, para que me inviten, para que vengan a verme. Yo no le he llamado a usted, y ha venido. -¿Sería feliz pasando inadvertida? -No; sólo quiero estar sola cuando estoy cansada. Vivo la época más importante de la historia y quisiera vivirla intensamente. Soy optimista. -Vea a Elsa Maxwell con la mala idea de Elsa Maxwell. -Durante los diez últimos años he hablado demasiado de mí misma; pero no es culpa mía, sino de ustedes. -Usted ha publicado un libro, “ Me casé con el mundo ”. ¿Le ha faltado el amor en su vida? -Nunca he encontrado al hombre, porque tengo gran respeto por la inteligencia y por la bondad. -¿Cree que usted vale tanto que no hay hombre a su medida? -No a mi medida, sino un hombre a quien yo hubiera respetado como marido. El hombre que yo he amado, nunca lo he visto. -¿Pero existe? -Sí, el profesor alemán Schweizer, que está en la jungla africana. -¿Lo sabe él? -Sí, y me ha escrito; pero vive para la paz y el bien de la humanidad. -Y con usted sería la guerra...

stats