España recibe las primeras 35.700 dosis de la vacuna de Moderna

Illa alerta de que viene un enero complicado y detalla que el domingo empezarán a ponerse las segundas dosis de Pfizer

M. Ferrer
3 min
La vacuna de Moderna.

MadridLa tercera oleada de la pandemia de coronavirus, la llegada de la vacuna de Moderna a España y los efectos del temporal Filomena han centrado la primera reunión del consejo de ministros de este 2021. El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha detallado que entre el miércoles y el jueves se repartirán las primeras 35.700 dosis de la vacuna de Moderna que se han recibido este martes entre las comunidades con el objetivo de que esta semana se acabe la primera vacunación en todos los geriátricos de España. De hecho, el domingo está previsto que Araceli, la primera mujer que recibió la vacuna de Pfizer en el Estado en una residencia de ancianos pública de Guadalajara, reciba ya la segunda dosis después de pasar las tres semanas de espera. Una semana después tendría que estar inmunizada, así como también todas las personas que hayan recibido la vacuna.

En total está previsto que España reciba casi 600.000 dosis de Moderna hasta el principio de marzo. De Pfizer ya han llegado más de un millón de dosis, pero solo se han administrado el 54% (en Catalunya el 56%) debido a los retrasos iniciales. Illa ha asegurado que ahora se está llegando a una "velocidad de crucero" en la vacunación para incrementar cuanto más mejor la inmunización de la población. Pero la tercera oleada de la pandemia ya se está haciendo notar y el ministro de Sanidad también ha admitido, durante la rueda de prensa telemática posterior al consejo de ministros, que "viene un enero complicado". Con todo, no cree que se tenga que poner encima la mesa un nuevo confinamiento domiciliario como el de la primavera pasada.

En la línea de lo que defendió el lunes el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, Illa ha señalado que con las medidas acordadas en octubre para hacer frente a la segunda oleada tiene que bastar. Simón culpó a los ciudadanos de no haber hecho los deberes por Navidad y de haber propiciado la situación de contagios desbocados actual. Cuando se le ha preguntado si no había también una parte de responsabilidad política, el ministro ha señalado que no era la hora de mirar hacia el pasado, sino de concentrarse en el futuro, y ha recordado que las medidas por las fiestas se acordaron entre el gobierno español y todas las comunidades.

Madrid, ¿zona catastrófica?

Sobre el temporal Filomena, el gobierno español ha sacado pecho de la gestión y anticipación de la gran nevada. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha leído un largo informe –el temporal ha causado cinco muertos en todo el Estado– como si estuviera compareciendo en el Congreso para rendir cuentas de su respuesta. Pero es que después del temporal ha llegado la tormenta política. El gobierno madrileño de Isabel Díaz Ayuso acusa a la Moncloa de falta de anticipación y ahora está el debate sobre si Pedro Sánchez declarará a la Comunidad de Madrid zona catastrófica. Durante el fin de semana parecía que no se planteara esta posibilidad, pero ahora Interior no lo descarta y señala que se está "evaluando". De todos modos, el Ayuntamiento de Madrid no lo ha solicitado formalmente a pesar de que Ayuso ha cargado este martes contra el consejo de ministros por no haber tomado ya una decisión.

De hecho, la ministra portavoz, María Jesús Montero, ha criticado que la presidenta madrileña "mire siempre al gobierno español cuando no quiere dar explicaciones de su gestión". Además, ha asegurado que ningún ciudadano "entenderá que antes prefiera hacerse una foto y culpar a los otros que poner en valor la coordinación entre administraciones". A pesar de que el PP madrileño carga contra la Moncloa, el líder estatal de los populares, Pablo Casado, ha rebajado este martes el tono y ha hecho un llamamiento a la unidad ante el temporal. "No hay colores políticos ni logotipos de las diferentes administraciones", ha señalado en una visita a la sede de emergencias de la Comunidad de Madrid.

Junto a Ayuso, ha querido agradecer el trabajo del ejército y de la ministra de Defensa, Margarita Robles. En cambio, ayer la portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, había elevado el tono contra el gobierno con un tuit: "Le faltan palas y ganas de trabajar, y le sobran ministros incapaces y un presidente con las manos en los bolsillos ante los problemas que afrontamos solo los españoles", dijo para enaltecer que Casado hubiera ayudado con una pala a sacar nieve del acceso de un centro de salud, informa Ot Serra.

stats