ABANS D’ARA

La república conservadora

D’Almirall (Barcelona, 1841-1904) a El Estado Catalán (28-V-1873). Confusions i paradoxes per la forma d’estat fa segle i mig. Encara avui papallonegen per l’opinió pública.

Valentí Almirall 1873
20/06/2014

Peces Històriques Triades Per Josep Maria CasasúsComo hace algunos siglos que a los españoles nos domina la influencia francesa, no es extraño que en vista del ensayo de esa quisicosa que se llama república de Francia, muchas clases de la sociedad española, que jamás habían pensado en ello, deseen para España una república que llaman conservadora. […] Bastarnos debería saber quiénes y por qué piden la república conservadora (dispénsennos que empleemos esta palabra aplicándola al caso), para que supiéramos que no ha de producirnos nada bueno, sinó mucho malo. Pídenla, no los que desean conservar lo digno, lo bueno que pueda hallarse en nuestra nación, sino lo injusto, lo odioso, lo privilegiado que con su dominación han sabido crear, […] Es un error que muchos sostienen de buena fe el creer que una república ha de conservarse con leyes conservadoras; error tan grave como el de los que creen que una república es tanto más revolucionaria cuanto más destruye y aniquila. […] ¡Ay de la república española si pretende ser conservadora, en el sentido francés de la palabra! Será sólo un puente que nos conducirá al príncipe Alfonso o a otro príncipe cualquiera; si pretende ser roja a la francesa, después de una ridícula parodia de lo que en Francia ha pasado, […] llegará a la descomposición completa, y entonces mandará, como ha mandado siempre en Francia, el que querrá o el que podrá. Si, en cambio, sabe ser verdaderamente revolucionaria, si sabe cambiar todas las instituciones, si sabe sustituir la unidad por el federalismo, el privilegio por la democracia, los pretorianos por ciudadanos armados, el liberalismo constitucional por la libertad, […] el desbarajuste administrativo por un sistema ordenado; si, en una palabra, sabe suplir todo lo que debe destruirse, por instituciones sabias que lo reemplacen, la revolución estará consumada, y la república española se conservará como se conservan todas las que han sabido seguir el camino que indicamos. En esto, y no en lo que pretenden muchos, consiste la república conservadora.