ABANS D’ARA
Efímers 28/10/2015

Las Cajas de Ahorros

D’un editorial de Solidaridad Obrera (25-IX-1936), el diari de la CNT dirigit llavors per Joan Perelló, Liberto Callejas (Maó, 1884 - Mèxic, 1969). Opinió anarquista en plena revolució.

Editorial De Solidaridad Obrera 1936
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Las Cajas de Ahorros

Peces Històriques Triades Per Josep Maria CasasúsHemos de considerar que las Cajas de Ahorros no son organismos capitalistas, que en las Cajas de Ahorros no hay dueños que a fin de año carguen con los beneficios obtenidos con el dinero del trabajador. Hemos de considerar que las Cajas de Ahorros son organismos a los cuales los trabajadores, ya mal pagados por la injusticia de una sociedad que desaparece, con sacrificio de lo más esencial para su propia vida, fruto de los sudores de rudas horas de trabajo, han ido llevando, poco a poco, peseta tras peseta, aquello que muchas veces se han quitado de la boca para prevenirse contra días de enfermedad o paro, contingencias de las que no les salvaba la antigua sociedad. Las Cajas de Ahorros no son organismos que guarden capitales de gentes poderosas; las Cajas de Ahorros guardan gotas de sudor de los humildes y de los desposeídos, […] Ésta es la mejor garantía de que las Cajas de Ahorros han de ser respetadas: que son frutos de una conjunción de esfuerzos del pueblo, que ahora son administradas por el mismo pueblo, y que sus beneficios sirvan para ayudar a evitar lágrimas y dolores de los niños, de los enfermos y de los viejos del pueblo. Las largas colas que a raíz del 19 de julio se formaron en sus puertas, van disminuyendo progresivamente. Pero todavía son muchas las gentes que, en un afán de atesoramiento, acuden periódicamente a retirar sus fondos, creyendo, ilusos, que en el fondo del fogón, en un rincón de la chimenea, detrás de un cuadro, entre el colchón o en una olla desvencijada, tienen más seguros los esfuerzos de sus trabajos. […] Las organizaciones obreras apoyan a las Cajas de Ahorros. ¿Quién ha de temer, pues, por su dinero?... Que nadie retire más que el importe justo de aquello que pueda necesitar. Que el que cobre un jornal siga viviendo de su jornal si no se le presentan gastos excepcionales. Porque el que sin necesidad acude a las Cajas de Ahorros a retirar sus fondos en un afán de atesoramiento, va contra una institución del pueblo e inconscientemente, en el mejor de los casos, labora contra la revolución.

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