La aportación de Fontserè a la ciencia (1970)

Peces Històriques Triades Per Josep Maria Casasús[...]

Eduard Fontserè, fundador de la Sociedad Geográfica de Barcelona y catedrático de Geodesia en la Universidad de Barcelona, fue el autor del proyecto de Observatorio Astronómico del Tibidabo, y director desde 1921 del Servei Meteorològic de Catalunya, que funcionó con sus 340 estaciones esparcidas por todos los ámbitos de las tierras catalanas hasta su destrucción en 1939 al terminar la guerra. […] De su obra Elementos de Ciencias Físicas y Naturales se hicieron hasta seis ediciones a partir de 1912. Este libro, publicado en la versión catalana de Artur Martorell en 1932, y su otra obra Elements de Geografia, escrita con la colaboración de Josep Iglesies y editada en 1938, son trabajos acerca de los cuales no hay necesidad de hacer elogio alguno. Son obras básicas, hechas a conciencia. En esta bibliografía hay también El cel de Catalunya, su magnífico discurso de apertura de curso del Ateneo Barcelonés el 20 de marzo de 1935, cuando éste se honró en elegirle presidente. El doctor Fontserè había llevado durante 72 años el Servicio Horario Municipal de la Academia de Ciencias. Cada día, con revoluciones, bombardeos, nevadas, vendavales y toda clase de inclemencias, el doctor Fontserè había ido a la Real Academia de Ciencias de la Rambla de los Estudios a efectuar el control horario confiado a la misma por el Ayuntamiento de Barcelona. […] Las dos aportaciones de importancia principalísima que el doctor Fontserè hizo a la ciencia universal […] fueron el Servei Meteorològic de Catalunya, creando con ello la meteorología catalana, y el Observatorio Fabra, desde el cual puso las bases para el conocimiento sismológico de nuestro país. El doctor Fontserè, cuyo cese como director del Servei Meteorològic fue decretado el 7 de agosto de 1939, […] había sobrellevado con entereza la destrucción de la obra de toda su vida. Alguna vez había dicho: “Si se hubiese destruido para crear en su lugar una obra nueva y bien montada, no me sabría mal, pero es el caso que no se ha hecho nada positivo, y el mismo Observatorio del Turó de l’Home, en el Montseny, está poco menos que abandonado.” […] En el año 1927 puso en el éter radiofónico de nuestro país el primer programa diario sobre previsión del tiempo. Hora sería de que todo el prodigioso archivo científico del Servei Meteorològic de Catalunya, que fue llevado a Madrid y a Salamanca, fuese debidamente devuelto a la Academia de Ciencias de Barcelona o a la Diputación de Barcelona, que sustituyó a la Generalitat de Catalunya de quien dependía aquel servicio, para que en este caso, en la Biblioteca de Catalunya -hoy ¡central!- pudiese ser puesto al servicio de los estudiosos, después de treinta y un años de estar inmovilizado. […]